‘Memory’: buenas actuaciones que no salvan un guion que no está a su altura

Jessica Chastain y Peter Sarsgaard protagonizan este drama con un planteamiento que promete pero que acaba defraudando

Memory trata de la relación entre Sylvia (Jessica Chastain), que se esfuerza por olvidar traumas de su niñez que la acechan constantemente, y Saul (Peter Sarsgaard), que tiene demencia, por lo que es incapaz de mantener parte de sus recuerdos.

El filme transcurre en torno a la contraposición entre el entorno familiar de Sylvia, que rechaza aquello que ella recuerda con claridad, con Saul, que se esfuerza en recordar todo lo que tiene que ver con Sylvia, en una lucha constante contra la demencia que padece.

Parece una premisa que promete. Sin embargo, la poca profundidad de los personajes más allá de los dos protagonistas y la falta de naturalidad en el desarrollo de los acontecimientos dan lugar a un guion que se queda corto ante las excelentes actuaciones de los actores principales.

Al principio de la película, Sylvia confunde a Saul con uno de los chicos que abusó de ella hace años, para más tarde descubrir que fueron al mismo instituto pero que no llegaron a coincidir. Aquí empieza a aparecer el tema de la memoria, pero esta confusión no vuelve a tratarse más adelante en la trama. Este será el primero de los muchos cabos sueltos que la película deja a medida que se va desarrollando.

A pesar de que uno de los temas principales de la película es el amor que surge entre ambos, su relación me ha parecido forzada y, en ocasiones, incluso incómoda. También me ha resultado difícil empatizar con los personajes, que son tratados con bastante distancia, con algunos planos en los que la cámara parece tener miedo de acercarse a la escena que está presenciando.

Las actuaciones de los protagonistas son dignas de las buenas críticas que están recibiendo, sobre todo, para mi gusto, la de Jessica Chastain. Pero muchos de los diálogos, sobre todo en las intervenciones de personajes más secundarios, me han parecido poco naturales y forzados. Personajes que también tienen importancia en la trama, como la hija de Sylvia o su hermana, no tienen profundidad y parecen solamente orbitar alrededor de los protagonistas.